A diferencia de las otras razas que han destacado en popularidad, el Rottweiler no es un dulce perro de caza (como el Labrador Retriever, el Golden Retriever o el Cocker
Spaniel) ni un adorable perro de pastor (como el Pastor Alemán). Tampoco tiene ninguna similitud con
el Caniche, a pesar del cariño que le tienen los alemanes a ambas razas. No, el Rottweiler es un perro enorme y bueno para el trabajo cuyo peso puede superar los 45 kg y cuya
estatura puede ser de hasta 68 cm. Seguramente, el Rottweiler debe poseer muchas buenas cualidades para ajustarse a los gustos de tantos propietarios de perros en todos los
lugares el mundo.
La fuerza y el coraje del Rottweiler le granjearon el favoritismo a principios del siglo XX. Después de haber sufrido un grave descuido a principios de este siglo, la raza
fue «llamada a filas» en la primera guerra mundial. Su actuación en las potencias del Eje, probaron sus extraordinarias habilidades como perro militar, y ello explica la destacadísima
actuación, décadas después, del Rottweiler en el Schutzhund. La vida en la sociedad actual, en la que hay un alto índice de criminalidad tanto en las grandes ciudades como en
los pueblos, un perro guardián con este impresionante tamaño y habilidad está muy demandado, tal y como lo demuestran, las estadísticas.
Al contrario que las otras razas de tipo moloso, como el Mastín Napolitano, el Dogo de Burdeos y el Bullmastiff, el Rottweiler es un perro equilibrado, bien proporcionado y no exagerado como los gigantes anteriormente mencionados, proclives a la acromegalia y a enfermedades peores. Es incluso acertado decir, que, para su tamaño, es un perro bastante sano, viéndose sólo afectado por la displasia de cadera y algunas otras pocas enfermedades, y su media de vida es mayor que la de otros perros de su tamaño. El pelaje negro liso y lustroso, acentuado por sus manchas de color fuego estratégicamente localizadas, cincela una bella figura. Su cabeza es impresionante, pero no desproporcionada con su cuerpo. Es, de todas todas, un animal majestuoso de un tamaño considerable, aunque no como el Mastiff y otras razas.
Un atributo importante que posee el Rottweiler es su adiestrabilidad. Es un perro muy inteligente y obediente, capaz de aprender muchas tareas. Su historia como pastor, como
perro militar y de guarda y como perro de obediencia y de exposición, habla muy bien de su versatilidad.
El Rottweiler es un animal protector por naturaleza, con la fuerza suficiente para guardarse sus instintos protectores. Muchos adiestradores aconsejan tomarse la educación
del Rottweiler con mucho cuidado, dados sus instintos naturales y su fuerza. Se ha utilizado, con gran éxito, el adiestramiento de Schutzhund, cuando éste ha sido dirigido
por un adiestrador profesional en un ambiente controlado. A los principiantes no debería ni pasárseles por la cabeza entrenar al Rottweiler para que ataque. Es imprescindible
la ayuda de un profesional. En Alemania hay innumerables adiestradores expertos en Schutzhund; en Inglaterra y en los EE. UU. es más difícil hacerse con sus servicios y por ello se recomienda
mucha prudencia en lo que se refiere a este tipo de adiestramiento. El Rottweiler es un perro digno de confianza y seguro, de acuerdo con su estatura y su orgulloso origen
alemán. Existen historias sobre el uso de Rottweiler como «transportadores de dinero » para el comercio: llevaban una bolsa con dinero atada alrededor del cuello. La
confianza y la fuerza se dan la mano en el caso del Rottweiler.
El estándar alemán para el Rottweiler, como está aceptado por el ADRK, describe el carácter ideal de la raza: «Su figura, corta, compacta y fuerte en proporción, da no sólo
todo el aspecto de inteligencia sino también una maravillosa devoción, ilusión y disfrute en el trabajo. Un perro tratable que posee una fuerza considerable y una tozuda resistencia. Su
aspecto general proclama que es un perro con determinación y coraje; su mirada calmosa indica su placidez y su inquebrantable fidelidad. No muestra traza alguna de intranquilidad,
precipitación o indecisión. La traición, la malicia y la falsedad son desconocidas de una forma total en su naturaleza».
Ciertamente, el estándar alemán describe a un perro que impresiona a muchos amantes de los perros: las cualidades de fidelidad, placidez y decisión son buenas en un perro del tamaño y la
fuerza del Rottweiler. Este perro es, a la vez, amigable e imponente. No hace amigos sin más: un extraño es un extraño. No es como los Retrievers, que aceptan inmediatamente
a cualquiera como un amigo. Los Rottweiler tienen discernimiento, tal y como se lo permiten su inteligencia y buen juicio.
Su naturaleza protectora también subraya su juicio, pero una vez le haya aceptado como un amigo, puede estar seguro de que tendrá a un compañero en quien poder confiar.
Los Rottweiler son ideales como protectores de la familia y de la propiedad. Acepta a todos los miembros de la familia y protegerá tanto al padre como al benjamín. Los
Rottweiler no suelen tener favoritos, aunque existen excepciones. Una vez tuvimos una hembra que sentía verdadera devoción por mi hijo mayor y que tenía menos devoción por
las chicas de la familia. No obstante, las hijas de esa perra eran afectuosas y protectoras con cualquiera de la familia. Los Rottweiler tienden a ser individualistas, y esto
es debido, una vez más, a que son criaturas listas y con discernimiento.
Su inteligencia afecta a su adiestrabilidad. Tal y como frecuentemente se dice de los gatos, son demasiado listos como para esperar a que se les repita una orden. Una vez la hayan ejecutado
una o dos veces tal y como a usted le gusta, seguramente se cansarán del juego y buscarán una salida mejor. «¿Por qué insisten los humanos en hacer estas cosas tantas veces? Ya he captado la
idea la primera vez y no era tan emocionante » parece que piensa el Rottweiler. Algunos ejemplares necesitan más ayuda que otros, pero siempre se requiere paciencia cuando se
adiestra a un perro, sin importar de qué raza sea.